Riesgos de comprar unidades de almacenamiento de segunda mano en ciberseguridad
La adquisición de dispositivos de almacenamiento usados, como discos duros, SSDs o memorias USB, puede representar un grave riesgo para la seguridad de los datos si no se toman las precauciones adecuadas. Aunque el ahorro económico puede resultar tentador, es fundamental comprender los peligros asociados a este tipo de transacciones.
1. Malware preinstalado
Uno de los mayores riesgos al adquirir dispositivos de segunda mano es la posible presencia de malware. Los atacantes pueden dejar intencionalmente:
- Keyloggers para robar credenciales
- Ransomware que cifra los datos del nuevo propietario
- Backdoors que permiten acceso remoto al sistema
- Spyware para monitorear actividad
2. Datos residuales sensibles
Incluso cuando el vendedor afirma haber borrado los datos, la información puede permanecer accesible mediante técnicas de recuperación forense. Esto incluye:
- Documentos personales o financieros
- Credenciales de acceso
- Historiales de navegación
- Información corporativa confidencial
3. Manipulación hardware (BadUSB)
Algunos dispositivos, especialmente memorias USB, pueden haber sido modificados físicamente para:
- Ejecutar comandos automáticamente al conectarse (ataques BadUSB)
- Simular ser dispositivos diferentes (teclados, tarjetas de red)
- Inyectar código malicioso en el sistema
4. Vida útil comprometida
Desde el punto de vista técnico, los dispositivos de almacenamiento tienen ciclos de escritura limitados. Un dispositivo usado puede:
- Tener sectores dañados no reportados
- Presentar fallos inminentes
- Ofrecer rendimiento degradado
Medidas de protección
Si es imprescindible utilizar dispositivos de segunda mano, se recomienda:
- Realizar un formateo de bajo nivel (no solo borrado rápido)
- Utilizar herramientas como DBAN para limpieza segura
- Analizar con antivirus actualizados antes de cualquier uso
- Considerar el uso en sistemas aislados inicialmente
- Verificar la autenticidad del firmware en dispositivos USB
Para más información sobre este tema, consulta la Fuente original.
En entornos corporativos o con datos sensibles, siempre es preferible adquirir dispositivos nuevos de fabricantes confiables y establecer políticas claras sobre el uso de medios de almacenamiento externos.