Usabilidad y adopción de criptomonedas en Venezuela: Un análisis técnico
En un contexto global donde las criptomonedas han evolucionado de activos especulativos a herramientas financieras funcionales, Venezuela emerge como un caso de estudio relevante. Según Aníbal Garrido, asesor y director de la Academia BT&C de la UCAB, el país ha alcanzado un nivel significativo de usabilidad de criptoactivos, superando la percepción de que operan en un “espacio gris”. Este artículo examina los aspectos técnicos y regulatorios que sustentan esta afirmación.
Infraestructura técnica para la adopción de criptomonedas
Venezuela cuenta con una infraestructura técnica que facilita el uso de criptomonedas:
- Penetración de Internet: A pesar de las limitaciones, el país mantiene una tasa de penetración de internet del 72%, según datos de 2023.
- Plataformas de intercambio: Existen múltiples exchanges locales e internacionales operando en el país, incluyendo Binance y plataformas venezolanas como Cryptobuyer.
- Adopción de wallets: El uso de billeteras digitales (hot wallets y cold wallets) ha crecido exponencialmente, con especial preferencia por soluciones móviles.
Marco regulatorio venezolano
Contrario a la percepción de un “espacio gris”, Venezuela cuenta con un marco regulatorio específico para criptoactivos:
- La Ley Contra Delitos Financieros (2020) reconoce el uso de criptomonedas.
- El Petro, aunque polémico, estableció precedentes legales para activos digitales.
- La Superintendencia Nacional de Criptoactivos (Sunacrip) regula el sector desde 2018.
Casos de uso predominantes
La adopción práctica de criptomonedas en Venezuela se manifiesta en varios escenarios:
- Remesas: Solución para transferencias internacionales evitando restricciones cambiarias.
- Comercio electrónico: Cada vez más negocios aceptan pagos en cripto, especialmente BTC y USDT.
- Protección contra inflación: Los stablecoins (principalmente USDT) funcionan como reserva de valor.
Retos técnicos persistentes
A pesar del progreso, persisten desafíos:
- Inestabilidad eléctrica: Afecta la operatividad de nodos y minería.
- Limitaciones bancarias: Restricciones para conversión cripto-fiat.
- Educación tecnológica: Necesidad de mayor formación en seguridad blockchain.
Como señala Garrido, Venezuela ha demostrado que las criptomonedas pueden integrarse efectivamente en la economía real cuando existe combinación de necesidad, infraestructura mínima y adaptación regulatoria. El caso venezolano ofrece lecciones valiosas para otros mercados emergentes.
