Cookie-Bite: Ataque mediante extensiones de Chrome para robar tokens de sesión y evadir MFA
Un nuevo ataque de prueba de concepto (PoC), denominado “Cookie-Bite”, ha sido identificado como una amenaza emergente en el ámbito de la ciberseguridad. Este método explota extensiones maliciosas de navegador para robar cookies de sesión de Azure Entra ID (anteriormente Azure Active Directory), permitiendo a los atacantes eludir protecciones de autenticación multifactor (MFA) y mantener acceso persistente a servicios en la nube como Microsoft 365, Outlook y Teams.
Mecánica del ataque Cookie-Bite
El ataque opera en varias fases:
- Inyección de extensión maliciosa: El atacante despliega una extensión de Chrome aparentemente legítima, pero diseñada para interceptar cookies de sesión.
- Extracción de cookies: La extensión accede a las cookies almacenadas en el navegador, específicamente aquellas asociadas con Azure Entra ID.
- Bypass de MFA: Al poseer las cookies de sesión válidas, el atacante puede autenticarse sin necesidad de superar los controles de MFA.
- Persistencia: El acceso se mantiene mientras las cookies sigan siendo válidas, permitiendo movimientos laterales dentro de los entornos cloud.
Implicaciones técnicas y riesgos
Este ataque representa un desafío significativo porque:
- Explota la confianza inherente en las extensiones del navegador, muchas veces instaladas por usuarios finales sin revisión de seguridad.
- Elude controles avanzados como MFA al operar a nivel de sesión ya autenticada.
- Permite acceso prolongado incluso después de cambios de contraseña, ya que las cookies de sesión pueden seguir siendo válidas.
Medidas de mitigación
Para contrarrestar esta amenaza, se recomienda:
- Implementar políticas estrictas de gestión de extensiones en navegadores corporativos.
- Utilizar soluciones de aislamiento de navegador o navegación segura para actividades sensibles.
- Configurar tiempos de expiración cortos para cookies de sesión en Azure Entra ID.
- Monitorizar actividades anómalas en cuentas privilegiadas.
- Educar a los usuarios sobre los riesgos de instalar extensiones no verificadas.
Conclusión
El ataque Cookie-Bite demuestra cómo los actores maliciosos continúan innovando para evadir controles de seguridad tradicionales. Su capacidad para comprometer credenciales sin interactuar directamente con mecanismos de autenticación subraya la necesidad de adoptar estrategias de defensa en profundidad en entornos cloud. Las organizaciones deben combinar controles técnicos con concienciación usuario para mitigar este vector de ataque.